Las aplicaciones de plástico ofrecen una ventaja especial cuando se trata de aumentar la autonomía de los coches híbridos y eléctricos, pero también de mejorar la dinámica de conducción.
Para ello se utilizan tanto elementos de diseño individuales como la llamada cobertura total o «full cover». Optimizan el flujo de aire alrededor de la rueda, con lo que se reduce la resistencia. Por regla general, este tipo de aplicaciones son de mayor tamaño que los elementos de diseño simples y permiten optimizar la resistencia al aire sin añadir demasiado peso a la rueda en comparación con una llanta de fundición maciza equivalente. Esto es especialmente importante en los vehículos eléctricos, ya que permite aumentar la autonomía. Además de aumentar el confort, con la reducción peso se mejora el comportamiento dinámico de vehículo. En el sector de los coches deportivos, también se utilizan aletas o difusores aerodinámicos para canalizar el flujo de aire alrededor de todo el vehículo. Esto se consigue gracias a la gran flexibilidad de diseño del plástico.
Para aumentar aún más las posibilidades de diseño, en las versiones Aero la superficie puede ser mate, texturizada o incluso muy pulida.